Cristo Jesús, como en el día de la Transfiguración te alabamos por los muchos creyentes que, desde hace 50 años, han unido sus oraciones a las de nuestra comunidad en la Iglesia de la Reconciliación. Concédenos que, en nuestras vidas, seamos portadores de reconciliación, allí donde vivimos, en nuestras familias, con los que nos rodean, con los cristianos separados, con los pueblos de la tierra.
Te alabamos, Cristo Jesús, por la comunión de tu Iglesia. Nos reúnes más allá de las fronteras. Mantennos en tu amor y haznos constructores de paz.
Comunidad de Taizé
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